Cuando el bebé nace, se manifiestan algunos reflejos que son manifestados más por el sentido de supervivencia que irán desapareciendo según va sintiendo que no los necesita. Estos reflejos son los de, succión, prensión y rotación, otro reflejo presentado es la adaptación que va adquiriendo el iris de sus ojos a la luz de su entorno.
Es a los 15 días de nacido que va a ir ganando control de sus ojitos, analizando y conociendo nuevas formas y objetos cercanos.
Según estudios, el cerebro tiene un peso de 350gr al nacer, logrando al primer año un aumento de peso del 60%, los bebés en los tres primeros meses ganan peso hasta de 200 gramos semanales, en talla aumentan 3 cm y en perímetro craneal por mes, 1-2 cm.
Esta es una etapa donde los niños absorben toda la información posible, la plasticidad de su cerebro aumenta a medida de la cantidad de estímulos que reciba a diario, será una etapa donde aquellos cosas que hacían por reflejo, empiezan a convertirse en hábitos, como la succión, entre más hábitos obtengan, más creación de redes neuronales perfeccionando continuamente cada acción.
Según La asociación Española de Pediatría, está demostrado que los niños logran adquirir un coeficiente intelectual más alto y un mejor vocabulario cuando crecen, a causa de los estímulos enviados por los padres, manifestados en la constante comunicación, el hablarles continuamente producen un nivel intelectual mayor en sus bebés.
El exponer a los niños a escuchar diferentes idiomas, le generará mayor facilidad de aprendizaje de otros idiomas en un fututo, cada estímulo enviado al bebé y que sea agradable para él, le permitirá adquirir nuevas capacidades y habilidades que serán manifestadas más adelante.
El desarrollo neuronal de los bebés, está altamente activo, es en esta etapa donde se produce un crecimiento masivo neuronal, incrementando la capacidad de aprendizaje e interacción con el medio que lo rodea, el bebé tiene mayor facilidad para adquirir conocimientos, aprender y recuperar información sin ningún tipo de esfuerzo.
Este procedimiento neuronal se considera como periodos críticos emocionales, que son manifestados solo por momentos, dando como resultado comportamientos alternos de mayor sensibilidad física en los bebés, aquí pueden llorar sin ninguna razón o irritarse con más facilidad por la sensibilidad causada ante la activación de neuronas cerebrales, donde demandan más atención de parte de sus padres, en contacto físico y amor brindado, esto permitirá la estabilidad y tranquilidad emocional en este tipo de cambios.