El desarrollo del bebé a esta edad, permite ver cambios notables ante el desenvolvimiento que muestra en la libertad de movimientos, donde su cabeza, espalda, brazos y piernas presentan mayor habilidad, su comportamiento cambia teniendo conductas y reacciones más avanzadas que en los anteriores meses, tanto así, que no podrán estar solos ni un solo segundo.
Una de sus características de movimientos se verá reflejada en el giro de su cabeza, logrando mayor facilidad para buscar algo o a alguien específico, puesto que los músculos de su cuerpo se han fortalecido durante el proceso de crecimiento.
Mostrará una mejor fuerza del cuello, que le permitirá sostener su cabeza por mucho más tiempo mientras está acostado boca abajo, si está boca arriba, tendrá la facilidad de levantar su cabeza para llevar su cuerpo hacia adelante, aunque le será mucho más fácil el darse vuelta de un lado a otro, siendo una forma para él de movilizarse, aquí también en esta etapa logrará sentarse, estando en posición firme por más tiempo.
El bebé de 6 meses, entrará en la etapa donde podrá levantarse con las manos y colocarse en posición de gateo, mientras esta sobre sus rodillas sostenido con sus manos, empezará a mecerse de atrás hacia adelante. Aunque en esta posición dure poco tiempo, es fundamental como ejercicio para fortalecer los músculos de la espalda, cadera, piernas y brazos, lo que le permitirá lograr más adelante el poder gatear.
Las manos también tendrán mayor capacidad, su agarre mejora teniendo mayor facilidad para sostener cosas en sus manos, pasándolas de una mano a otra con un mejor manejo de sus dedos para agarrar cosas pequeñas. Es por esto la importancia de estar siempre bajo cuidado, ya que le será mucho más fácil tomar cualquier objeto y metérselo a su boca.
El meterse cosas a su boca hace parte de su sentido de exploración y su necesidad por descubrir nuevas cosas, la forma inmediata para poder identificar objetos, es llevarlos a la boca y probarlos, además que por el brote de algunos dientes, la mayoría incisivos, hará que algunos objetos sean usados como calmantes para sus encías, por esta razón será muy normal el aumento de salivación durante este proceso.
El comportamiento del pequeño también será parte del cambio, aquí su comprensión ante las cosas y situaciones que gira a su alrededor está más desarrollada, queriendo ser siempre el centro de atención, así que buscará llamar la atención, teniendo comportamientos de malestar, berrinches, o con simples sonidos y balbuceos se las arreglará para lograr que la atención esté puesta sobre él, estos comportamientos son parte importante de su proceso de socialización en su desarrollo, aquí el bebé valorará mucho más la compañía de padres y cuidadores disfrutándola al máximo.
Esta edad es precisa para enseñarle la manera correcta de comportarse según las diferentes situaciones y conforme a las reacciones que el bebé puede presentar, teniendo claro que su comportamiento variado es solo un medio donde puede experimentar diferentes emociones, siendo parte del desarrollo emocional del bebé.
Es aquí el momento perfecto, donde se puede ir redireccionando sus comportamientos y actitudes, llevándolo a comprender lo que está mal y así mismo lo que hizo bien, felicitándolo y alabándolo por algo bueno, así sea pequeño, para estimular su seguridad ante lo que realiza a diario, haciendo las correcciones pertinentes de forma correcta, acentuando las tonalidades de voz de forma cálida pero explicativa para que el bebé comprenda la información enviada.