Ser el único adulto a cargo de un pequeño es un desafío para el que pocos están preparados, pero que muchos se ven obligados a enfrentar, con todo y las dificultades que esto involucra, muchas veces transformando totalmente la vida de la madre o padre.
Si bien la felicidad y satisfacción de criar a un hijo son iguales que al compartir la crianza con una pareja, hay obstáculos y dificultades que son exclusivas de las familias de un solo padre. Por estas razones, hay ciertas cosas que deben mantenerse en mente cuando se está criando a un hijo como madre o padre soltero.
Mantén una buena comunicación con tu hijo o hija
Involucrarte en la vida de tus hijos es algo indispensable a la hora de la crianza, pues no puedes contar con la perspectiva o ayuda inmediata de otra persona que comparta vida con ustedes. Si todavía es un bebé, pasa el mayor tiempo que puedas con tu pequeño y no sacrifiques este tiempo por nada, claro, siempre dentro de tus posibilidades.
En edades escolares, es incluso más importante estar presente y comunicarte efectiva y afectivamente con tu pequeño, pues solamente tú podrás estar al tanto de lo que sucede en su vida y lo que puede estar afrentando en esos momentos.
Nunca es malo pedir ayuda
La crianza como madre o padre soltero suele ser ilustrada como una crianza solitaria, sin ayuda ni dependencia en otros, y normalmente, es justamente eso lo que puede ser catastrófico para ti y para el desarrollo de tu hijo o hija.
Pedir ayuda a familiares cercanos u otras personas de extrema confianza nunca es mala idea, de hecho, existen proverbios que enfatizan que se requiere de una aldea para criar a un niño. Esto quiere decir que no estás sola o solo en este proceso, sino que tu red de lazos cercanos te puede servir de soporte en la crianza, ya sea directamente cuidando a tu pequeño o apoyándote a ti en este viaje.
Pensar con quién dejas a tus hijos
Muy relacionado con el punto anterior sobre pedir ayuda, habrá momentos en que no puedas estar ahí para cuidar de tu hijo, ya sea por motivos laborales o de otros compromisos externos, y es en esos momentos que deberás considerar dejar a tu pequeño bajo el cuidado de terceros.
No se puede enfatizar lo suficiente, lo importante que es saber con quién dejas a tus hijos y qué clase de ambiente están generando. Es muy diferente dejar a tu pequeño con tus padres que con algún hermano o tío, al igual que no es lo mismo que dejarlos con una niñera que en una guardería especializada y respetable. Es por eso que elegir dónde dejas a tu hijo es una decisión tan delicada.
Cuida de ti mismo o de ti misma
Finalmente, es indispensable cuidar de tu propia salud y bienestar, pues solo así podrás garantizar la crianza adecuada para tu pequeño. Ser un único padre o madre no quiere decir que tu vida entera deba girar en torno a tu pequeño, pues sigue siendo crucial cumplir con obligaciones laborales, ver a tus amigos, a tu familia y disfrutar tu vida. Tu bienestar se verá profundamente reflejado en el de tu pequeño, y en un futuro, verás el bien que hiciste en tu trabajo como padre o madre.
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