El bebé de 3 meses está en un proceso transicional, de cambios constantes a nivel físico, visual, de lenguaje y cognitivo, lo que hace necesario realizar procedimientos que lo estimulen de forma integral.
Existen algunas actividades que se pueden realizar en casa como medio para estimularlo, aunque se cuente con muy poco tiempo, se puede implementar de forma sencilla y práctica estos procesos dentro de la cotidianidad diaria, trayendo beneficios que duraran toda la vida.
A esta edad su percepción ha aumentado y su visión es cada vez más fija. Se recomienda que se usen objetos, sonajeros de colores llamativos, con movimientos de izquierda a derecha, haciéndolos sonar. El bebé al escuchar el sonido moverá su cabecita tratando de seguir el sonido, se debe hacer de forma lenta para que el niño no pierda la fijación del juguete. Con este ejercicio el bebé ejercitará los músculos de su cuello, agudizará su visión y su sentido auditivo.
Los móviles son excelentes para estimular su visión, manteniéndola fija por más tiempo, además de aumentar su concentración, su cuerpo también se está ejercitando, ya que es muy común a esta edad que mueva sus brazos y piernas fuertemente mientras observa o escucha algo que le guste. Tratar que los móviles de colores estén cerca de él, para cuando se mueva pueda tocarlos.
Las luces de colores son una buena herramienta para ejercitar los músculos del ojo del bebé, claro que estas luces no deben ser tan intensas, ni mucho menos caer directamente en sus ojos. Estas luces pueden estar decorando, moviéndose por la habitación, de igual manera se puede hacer uso de una linterna, para que alumbre una pared o el techo, moviéndola de derecha a izquierda, de arriba o abajo, manejando movimientos suaves que permitan que el niño observe mientras sigue cada movimiento de la luz.
Cuando sea la hora del baño del bebé, se pueden usar pelotas o bombas de colores.
La música es vital para agudizar la audición, trabajar su memoria y concentración. Las melodías suaves armonizan y tranquilizan al niño mientras duerme o hace alguna actividad.
También se debe integrar ejercicios motores, para estimular la coordinación de sus extremidades durante el movimiento, como el flexionar suavemente sus piernas y brazos, en varias repeticiones. También se puede hacer de forma intercalada como doblar una pierna mientras la otra esta recta, de igual manera con los brazos.
Los masajes ayudan a relajarlo y estimulan el sentido del tacto, al sentir las manos de mamá o papá en su cuerpo, le dará mayor seguridad y confianza, además de estimular su sistema nervioso central.
El llevar sus pies y manos a su boca, estimulará sus capacidades cognoscitivas que lo llevará a reconocer su cuerpo por medio del tacto.
Para ayudar al bebé a que se familiarice con el lenguaje y todas sus expresiones se requiere de dedicación para hablarle constantemente en cada actividad que se haga en casa con él, también, el emitir sonidos, como “brrrr”, “guuurr”, “mmm”, lo motivará de forma inmediata a repetirlos.
Cada acción que se realice dentro de la cotidianidad debe estar acompañada de la expresión y de la explicación de cada cosa. El permitirle tener un reconocimiento del lugar donde se encuentra, colores, objetos, con un tono agradable, pintoresco, exagerando la modulación de las palabras, para que con mayor facilidad quede guardado en su memoria.
Lo recomendable para cuando se realicen estas actividades, es, que el ambiente este tranquilo, sin ruidos externos, para que el bebé no se distraiga y pueda concentrarse.