Una de las primeras necesidades de compra cuando se tiene un bebé siempre será el cochecito. Es la herramienta más práctica para desplazar al bebé de forma segura a cualquier lugar. Se debe elegir el cochecito ideal valorando las necesidades y el uso que se le va a dar, y así, encontrar el que más se ajuste a lo que requieren los padres.
Por ejemplo, el tamaño es muy importante a la hora de determinar la elección. Si es muy grande, existe la posibilidad que tenga dificultades para su manejo, para entrar a puertas reducidas y aún para guardarlo en el coche. Lo ideal es hacerse de un cochecito de tamaño estándar que se adapte a los lugares frecuentados con regularidad.
Evaluar el peso también será importante a la hora de escoger, ya que de esto depende la facilidad para acomodarlo en el coche, en el bus, bajar escaleras o poder trasladarlo en las calles sin inconvenientes, que permita una fácil movilidad y control del cochecito.
Para esto, se debe tener en cuenta la resistencia de las ruedas y de la estructura, debido a que esto influye en que el coche se haga más pesado o más liviano. Por ejemplo, una estructura ligera se hace pesado al esfuerzo que se debe realizar al momento de subir una acera, en cambio una estructura pesada se vuelve ligeros a causa de la suspensión que aligera el esfuerzo realizado.
El tamaño de las ruedas hace parte de la buena funcionalidad y se deben tener en cuenta según los terrenos en los que se trasladarán. Las ruedas grandes son para todo terreno y permiten bajar o subir escaleras con facilidad al igual que a las aceras, las pequeñas son más para ciudad y para terrenos con menos dificultad al andar.
Se necesita un cochecito que ruede bien, sin ningún tipo de ruidos, suave y manejable.
La comodidad para el bebé es indispensable, es lo que garantizará el confort de su paseo y el disfrute a lo largo de sus etapas de crecimiento. Tanto el capazo como la silla de paseo deben garantizar comodidad.
Si se va a usar con recién nacidos, la estructura debe ser reclinable hasta los180º, y verificar que el colchón sea suave para que descanse la espalda, y que contengan materiales transpirables.
Para los recién nacidos, es recomendable usar un reductor que ofrezca un soporte a la cabeza, cuello y cuerpo del bebé. Que pueda proteger en todo momento de los movimientos del camino.
Si se quiere usar el cochecito indefinidamente, se puede elegir una silla que sirva para usar hasta los 2 o 3 años, para no tener que comprar otra más adelante
Por último y no menos importante, verificar los sistemas de seguridad es primordial Debe contar con un sistema de arnés por lo menos de cinco puntos para sostener al bebé, ofrecer optima estabilidad, excelentes frenos, que cuente con un sistema de bloqueo en las ruedas que se pueda activar con facilidad y que tenga buena amortiguación.