Es justamente durante el embarazo cuando más se necesita dormir. Además, una vez haya nacido el bebé, una noche de sueño reparador será mucho más difícil de conseguir. Pero, ¿qué es lo que hace que el insomnio durante el embarazo sea mucho más difícil de tratar? Si quieres descansar plenamente durante la noche, a continuación, te damos unos consejos que te serán de mucha utilidad.
Una mujer embarazada necesita dormir ocho horas completas, pero la verdad es que tener 8 o 9 horas de sueño ininterrumpido puede parecer una vaga fantasía ahora que estás embarazada: ¿recuerdas que antes apagabas la luz de tu habitación y te dormías enseguida? Si no es por la molesta presión sobre la vejiga, es por el dolor de espalda, los calambres en las piernas o simplemente la reticencia a acomodarse en la cama que antes te acunaba suavemente para dormir.
¿Qué es exactamente el insomnio?
El insomnio es descrito como una dificultad para conciliar el sueño, para mantenerlo o para ambas cosas. Este problema de sueño tan común también puede hacer que te despiertes demasiado pronto y no puedas volver a dormir, así como hacer que sientas que el descanso que has conseguido no ha sido satisfactorio ni reparador.
¿Cuándo se produce el insomnio durante el embarazo?
El 78% de las mujeres experimentan problemas de sueño en cualquier momento durante el embarazo, aunque es más frecuente en el primer y tercer trimestre.
Entre la búsqueda de una postura cómoda para dormir y los efectos secundarios del embarazo, como el aumento de las ganas de orinar, el reflujo ácido, los calambres en las piernas, la obstrucción nasal y la incomodidad general, no es de extrañar que toda una noche de sueño pueda ser tan resbaladiza. Para empeorar aún más una situación ya de por sí difícil, los problemas de sueño, como la privación de sueño y la apnea obstructiva del sueño, serán, en general, más normales cuando se está embarazada.
¿Qué factores contribuyen al insomnio durante el embarazo?
El insomnio, al igual que muchas otras molestas afecciones relacionadas con el embarazo, puede atribuirse en parte a las fluctuaciones hormonales. Junto con el culpable normal, hay una serie de razones que pueden conspirar para mantenerte despierta por la noche, como, por ejemplo:
- Ir al baño con frecuencia.
- Acidez, estreñimiento o náuseas matutinas durante el embarazo.
- Dolores y molestias, como dolores de cabeza, dolor de ligamentos circulares y sensibilidad en los pechos.
- Calambres en las piernas y síndrome de las piernas inquietas.
- Sueños vívidos o inquietantes.
- Dificultad para acostumbrarse a un creciente vientre.
- Un ajetreado bebé a bordo que patea, da vueltas en la cama y gira.
- Tokofobia o miedo al parto.
¿Cómo dormir bien durante el embarazo?
Es de suponer que sufrirás un montón de noches inquietas una vez que aparezca el bebé, así que es esencial que duermas lo suficiente mientras puedas. Cambiar tus hábitos de sueño y controlar cualquier problema relacionado con el insomnio puede restablecer el sueño tranquilo de algunas mujeres. Para ello, lo recomendable es:
- No tomar bebidas con cafeína antes de ir a la cama.
- No hacer comidas copiosas a horas próximas a la de dormir.
- Limitar el tiempo que pasas en la cama cuando no tienes intención de dormir, como ver la televisión o estar con el teléfono.
Si hay un problema mental o médico oculto que creas que puede ayudar a padecer de insomnio (como depresión y ansiedad durante el embarazo), recibir un tratamiento adecuado para ello puede aliviar los problemas de sueño. El insomnio durante el primer trimestre puede ser algo normal para la mayoría de las mujeres, por lo que tampoco deberías asustarte mucho si te sucede. A su vez, intenta hacer siestas a lo largo del día para compensar ese tiempo perdido durante la noches; además, debes evitar tomar cualquier vitamina, medicamente o hierba que induzca el sueño hasta que te reúnas con tu médico. Por otro lado, si tu insomnio te impide dormir, tu médico puede recomendarte un sedante que sea seguro de usar durante el embarazo.
Submit comment Cancel Reply