Muchas madres tienen temor de dejar el cuidado de sus bebés con otras personas porque se suele pensar que esto puede afectar el vínculo afectivo que se tiene; pero esto no necesariamente es así, si se realizan procedimientos adecuados.
Sabemos que el apego seguro es un vínculo afectivo necesario en el bebé que le permite desarrollar habilidades para responder emocional y socialmente de manera adecuada. Cuando la madre da respuesta a las necesidades de su hijo, mantiene cercanía, responde a su llamado y le brinda una disponibilidad física y emocional, promoverá su seguridad y autoestima.
Conforme a los vínculos que el bebé tenga con sus padres o cuidadores, determinarán la manera de relacionarse a lo largo de toda su vida, si el bebé tiene una relación de apego seguro con su cuidador, también adquirirá la seguridad para explorar su entorno. Así, que el vínculo o apego seguro no se dañará, aunque la madre tenga largas horas de ausencia por su trabajo, solo si antes de irse o al regresar presenta disponibilidad afectiva con el niño y mantiene rutinas diarias que le permiten impartir amor y realizar actividades juntos.
Esta separación puede llegar a ser difícil para la madre como para el bebé, por lo que es importante sobre llevar el proceso y además seguir los siguientes consejos:
- Dejarlos con personas amorosas: Déjalo al cuidado de una persona que le brinde mucho amor y cuidados para que se pueda formar una relación estrecha que le promueva seguridad y tranquilidad, le brinde todo lo que requiere, no solo físicamente sino también emocionalmente.
- Evitar los cambios constantes de cuidadores: La idea es fomentar una relación estrecha entre cuidador y el bebé, al cambiar de cuidador de manera habitual, irrumpirá el vínculo afectivo que debe desarrollarse en el bebé.
- Dejarle algún objeto o manta: El dejarles alguna manta de la madre o una almohada, le permite al niño sentir a su madre cerca.
- Manejar la ansiedad: Las madres también viven el proceso de separación, lo que es normal que presenten ansiedad del saber cómo está el bebé, por esto la importancia de encontrar personas aptas para el cuidado y con experiencia para tener mayor tranquilidad.
- Dejarle al cuidador todo por escrito: Horas de comida, horas de cambios de pañal y rutinas que solía hacer con la madre para que el bebé no tenga dificultad en adaptarse.
El proceso de separación puede ser difícil para cualquier madre, así como para los bebés, pero si se tienen en cuenta las anteriores recomendaciones, podemos hacer que todo sea más llevadero, eso sí respetando los tiempos de calidad y los tiempos de compartir para que la relación con los niños siempre esté bien fundamentada y a su vez se pueda satisfacer las necesidades emocionales que requieren.